De camino a Kinsale y a Cork desde Kinvarra nos encontramos un pueblo grande llamado Gort. La mañana en que llegamos había mercadillo, aunque sólo de ropa de señora mayor, en una zona de aparcamiento en el cruce de dos calles grandes de dos direcciones, y a nosotros la ubicación nos parecía arriesgada, con esa costumbre que tienen allí de conducir por la izquierda y hacerlo todo más difícil y peligroso.
El lugar brindaba ese cielo gris encapotado que parece la decoración del país, sobre unas casas del mismo color en su gran mayoría. Por eso los de nuestras latitudes, acostumbrados al sol y a la intensidad de los colores, agradecíamos esas fachadas inverosímiles en tonos pistacho, rosas, lilas, naranjas, rojos, azules, que nos regalaban algo de alegría para el espíritu, y las flores, las macetas y parterres rebosantes de flores de primavera, colgados de todas las ventanas y farolas, en las barandas, las aceras, las puertas…
Allí en Gort descubrimos la más floreada de las cafeterías con terracita exterior, en una casa pintada de verde claro, con una bicicleta colgada de una ventana y con su dueña a punto de iniciar el vuelo.
Al final de esa calle había una iglesia, con ese pináculo puntiagudo tan peculiar de la zona. Aunque reconvertida en biblioteca municipal, conservaba el cementerio. Y fue allí, entre las lápidas, en unos textos de unas pocas letras, donde pude leer unas historias que, si bien eran breves, brevísimas, me golpearon hasta hacerme saltar las lágrimas.
Por supuesto que un cementerio es un lugar de tristeza y dolor. Pero cuántas veces nos consta que nadie echa de menos a los que son llevados allí.
Yo leí, en ese pequeño cementerio de Gort:
In loving memory of
SUSAN CURLEY
Crowe St. Gort
Murió el 1 de enero de 2005, a la edad de 89 años
Su marido JIMMY
Murió el 31 de agosto de 1942, a la edad de 30 años
Enterrado en Manchester
In loving memory of
MARY WALSH
Murió el 10 de junio de 1992
Su hermano JOHN G. O’REILLY
Murió en Melbourne, Australia,
el 14 de agosto de 2002
Erigido por su sobrino PAUL WHELAN
In loving memory
SEAN LEHAY
Garrabeg, Gort.
Murió el 13 de noviembre de 2002, a la edad de 65 años
Su hijo IVAN
Murió el 10 de junio de 1968,
a la edad de 2 años y 6 meses
Una chica de veintiséis años que sobrevive una vida entera a su joven marido, que quizá muere en la terrible Segunda Guerra Mundial, en Inglaterra.
Un sobrino que añade en la lápida familiar a uno de los tíos, fallecido en la otra punta del mundo, porque la familia importa.
Unos padres que hacen constar que un niño de dos años y medio vivió y se fue, pero que ellos le han recordado siempre, hasta el final.
Esto lo vi yo en un pequeño cementerio en Gort, Irlanda.
Déu n’hi do! Si que fa pensar, sí…
Qué bonito! Voy a pasar unos días este verano en Gort. Buscando información he encontrado tu blog. Visitaremos el cementerio. Gracias por el consejo.